Desde este comunicado, en el día de la Iglesia Diocesana, desde Cáritas Tomelloso nos queremos hacer eco de la campaña de personas sin hogar bajo el lema Fuera de cobertura.
Sin cobertura sanitaria, social o legal. Cada vez son más las personas desvinculadas de la sociedad. Sin protección, sin recursos, sin oportunidades… Con sus derechos vulnerados, personas que, hoy más que nunca, necesitan de una red de apoyo que las sostenga, las integre y les permita participar.
El papa nos recuerda en la VI Jornada Mundial de los pobres que “Jesús se hizo pobre por ustedes” (2Co 8, 9). Nos recuerda los meses duros vividos en la pandemia y cómo ha aparecido en el horizonte una nueva catástrofe, destinada a imponer al mundo un escenario diferente. La guerra en Ucrania ha venido a agregarse a las guerras regionales que en estos años están trayendo muerte y destrucción.
Este texto de S. Pablo presenta la gran paradoja de la vida de fe: la pobreza de Cristo nos hace ricos. Si Pablo pudo dar esta enseñanza —y la Iglesia difundirla y testimoniarla a lo largo de los siglos— es porque Dios, en su Hijo Jesús, eligió y siguió este camino. Si Él se hizo pobre por nosotros, entonces nuestra misma vida se ilumina y se transforma y adquiere un valor que el mundo no conoce ni puede dar.
También en nuestros días parece difícil, como lo fue entonces para los discípulos del Señor, aceptar esta enseñanza (cf. Jn 6,60); pero la palabra de Jesús es clara. Si queremos que la vida venza a la muerte y la dignidad sea rescatada de la injusticia, el camino es el suyo: seguir la pobreza de Jesucristo, compartiendo la vida por amor, partiendo el pan de la propia existencia con los hermanos y hermanas, empezando por los más pequeños, los que carecen de lo necesario, para que se cree la igualdad, se libere a los pobres de la miseria y a los ricos de la vanidad, ambos sin esperanza.